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ECOGRAFÍA EN EMBARAZO GEMELAR
El embarazo gemelar es un embarazo de alto riesgo per se cuando lo comparamos con un embarazo simple. Existen dos grandes grupos de embarazos gemelares desde un punto de vista del manejo clínico (control médico): embarazos bicoriales (que no comparten la placenta) y embarazos monocoriales (comparten la placenta). Esta diferenciación debe realizarse por durante el primer trimestre de de embarazo, ya que la exactitud del diagnóstico de corionicidad (placenta compartida o no) se va perdiendo en el segundo trimestre, siendo en algunos casos imposible de determinar a través del estudio ecográfico cuando el embarazo avanza.
La distinción del tipo de placentación (corialidad) no siempre tiene en cuenta si son gemelos idénticos genéticamente o no. Existen datos de la ecografía que nos pueden hacer inferir la genética, por ejemplo, si vemos dos placentas separadas o si los sexos los fetos son diferentes, sabemos inequívocamente que se trata de gemelos no idénticos (dicigotos) y por lo tanto, se trata de embarazos bicoriales. Este tipo de distinción a través de la ecografia muchas veces no es posible ya que encontramos placentas fusionadas y fetos de igual sexo, por lo tanto, debemos basarnos en los signos del primer trimestre para el correcto diangóstico de corialidad.
A pesar del interés obvio que tienen para los padres saber si son idénticos o no, el dato relevante para el control médico es saber si son bicoriales o monocoriales, ya que como he dicho previamente, tienen grandes diferencias en el pronóstico perinatal y a largo plazo; la posibilidad de malformaciones; alteraciones genéticas y patologías propias del embarazo.
En el siguiente cuadro se presentan el porcentaje de complicaciones fetales según corialidad (de acuerdo a compartir o no la placenta)
Aproximadamente el 70% de los embarazos monocoriales cursaran su gesta sin mayores complicaciones y resultarán en recién nacidos vivos y sanos. El 30% presentará complicaciones que, en general, son severas, con alto riesgo de morbimortalidad perinatal y a largo plazo.
Este hecho justifica un seguimiento diferencial de este tipo de embarazos. Las guias ISUOG (por la sus siglás en inglés, International Society in Obstetrics and Gynecolgy) publicadas en el 2016 proponen, que en el caso de no presentar complicaciones agregadas, el seguimiento debe ser el siguiente:
Con el fin de simplificar el protocolo de control, un embarazo gemelar monocorial debe tener seguimiento ecográfico cada dos semanas luego del screening 11-14 sem y un embarazo bicorial una vez por mes luego de la semana 20-22.
Controlar embarazos gemelares requiere conocer las patologias propias de los mismos (síndrome transfundido transfusor, RCIU selectiva, secuencia anemia policitemia, etc) consecuntemente, su monitoreo es mucho más complejo (un embarazo múltiple es mucho más que la suma de dos embarazos simples). Se requiere experiencia médica y dedicarle mayor tiempo al estudio ecográfico. Este es el motivo por el cual, este tipo de estudio ecográfico nos lleva a menudo un tiempo incluso mayor a dos turnos de ecografía habitual. Una vez que hallamos tomado contacto con usted como paciente, programaremos dicho seguimiento para evitar futuros inconvenientes con el manejo de los turnos.
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